sábado, 7 de mayo de 2022

La Fiesta De Mi Tio 1 Por Gus Becker & Elena X

 La Fiesta De Mi Tío 1





Desde que mis padres se divorciaron papá desapareció y nunca más lo vimos, solo sabemos que se fue con una vecina a otra provincia y perdimos todo contacto, él se olvidó de nosotros y especialmente de mí, su hijo. Mi nombre es Gastón, tengo 15 años y soy hijo único, mamá se llama Sandra, tiene 38 años, mide 1,53 mts de altura, es bajita pero con buenas formas, no lo digo porque es mi madre y la quiero, sino porque es cierto, es delgada con unas medidas 95-64-105, al tener una espalda chica se destacan mucho sus redondos senos y su prominente cola, no es una modelo, pero si un linda mujer de tez blanca, cabellera morocha que le llega hasta un poco más abajo de sus hombros, lacia, nariz natural tipo griega, boca de labios gruesos, ojos oscuros y grandes. Los hechos que voy a narrar sucedieron hace solo un par de semanas nada más, en el cumpleaños de mi tío, su hermano mayor que cumplía 44 años y lo festejaba en su casa invitando a toda la familia y amigos, como era su costumbre. Él tiene una enorme casa con un gran parque arbolado, en el conurbano, en una zona de casas quintas, bastante lejos de donde vivimos, con más de una hora de viaje, esto es lo que medio tiraba atrás a mamá, dado que no tenemos auto, teníamos que desplazarnos en colectivo, y por lo general ese transporte público pasaba cada muerte de obispo. El tema se complicaba para ir, porque siempre al regreso hay alguna persona que nos acerca o de tener suerte nos traiga a casa. Llegó el sábado y a eso de las 5 de la tarde ya estábamos listos, yo con un jeans azul, remera y una campera por si refrescaba a la noche, y mamá con un vestido ajustado rojo oscuro con flores negra, de escote cuadrado y largo un par de centímetros por arriba de las rodillas, sus torneadas piernas estaban enfundadas en un par de botas altas, negras de cuero, usó un collar negro y el pelo recogido con una hermosa coleta en la nuca, sin estar vestida llamativa, les aseguro que no pasaba desapercibida. Como la tarde estaba templada el tapado del mismo color de su calzado, lo llevaba en la mano, al igual que su cartera. Salimos de casa y caminamos tres cuadras para llegar a la parada del maldito colectivo que no venía, pasó más de una hora estaba anocheciendo y nosotros éramos las únicas personas que estábamos ahí. Evaluamos otras alternativas de ir, pero un remis salía muy caro y si tomábamos otro bus teníamos que hacer combinación con el tren y se nos alargaba al doble el tiempo de viaje. Faltaban algunos minutos para las 7 de la tarde y del colectivo ni noticias, en eso pasó una van que tenía un cartel que indicaba que iba para la misma ciudad que nosotros, paró, bajó la ventana y un hombre morocho de más de cincuenta años y con una apariencia de delincuente que daba miedo nos dijo: -No se gasten esperando el colectivo, los chóferes están con conflictos gremiales, no creo que pase… ¿Por qué no suben? Con mamá nos miramos con desconcierto, no sabíamos que hacer, si el tipo inspirara algo de confianza aceptaríamos pero era como embarcarse con Freddie Krueger. Ante nuestro silencio volvió a insistir: -La tarifa les va a salir menos que un Uber y no van a tener que esperar, aprovechen que ya estoy acá… Por suerte de una de las ventanas asomó la cabeza de un pasajero, hombre mayor, con corbata, fue verlo y pensar si ese sujeto sigue vivo tal vez podamos llegar a destino. Subimos y efectivamente ese tipo era el único pasajero sentado en la fila de asientos individuales, por lo tanto con mami nos sentamos al lado de él pero en asientos dobles y tomados de las manos como dándonos ánimos. Para nuestra desgracia el viejo bajó a los pocos minutos y quedamos solos con el chófer, quien aprovechó para subir el volumen de la cumbia que estaba escuchando, sin preguntarnos si nos molestaba. En los parlantes del vehículo sonaba la canción “Laura se te ve la tanga” de Damas Gratis y como queriendo ser gracioso viendo a mamá por el espejo retrovisor le dijo: -¿Preciosa no te llamarás Laura vos, no? Jajajajajaja. Intuitivamente ella apretó sus piernas por si por casualidad estuviera enseñando algo más de lo debido. -Quédate tranquila corazón que no me mostraste nada… si lo hicieras no sería tan boludo de decírtelo, disfrutaría de la vista todo el viaje… ¿No te parece? Tenía ganas de ponerlo en su lugar y defender a mi madre pero permanecí en silencio paralizado por el miedo que imponía ese rostro fiero. El hombre continuó durante la marcha para sacarle conversación a ella. -Mi reina venís muy elegante ¿Van a algún casorio? -Al cumpleaños de mi hermano… Dijo tímidamente -Ahh, con razón… ya me gustaría ser amigo de él para estar invitado y sacarte a bailar Jajaja… ¿Sabés qué bien baila la cumbia? -Pero a mi hermano no le gusta mucho, él escucha música más tranquila… -¿No le gusta los Lirios o el Peppo? -No, prefiere Phil Collins y Joe Cocker… -Mejor así bailamos bien apretaditos los dos… cachete con cachete y ombligo con ombligo Jejejeje. Al instante ella se sonrojó mucho más que su vestido. -¿Y vos pendejo cómo te llamas? -Gastón. -Gastoncito por ahí tenes suerte y te levantas alguna minita… y si no hay o no te dan bola acordate que una primita vale lo mismo Jajajajajaja… y más si la hermosura viene de familia y se parece a tu mamita… espero que no seas guardabosques y le espantes los galanes a tu mami que vestida así seguro no le van a faltar, se le van a acercar como las moscas a la miel… no seas alcahuete y después se lo cuentes a tu papá, déjala disfrutar a mami de la festichola… -Hace años que no sabemos de papá… -Qué pena… si querés te adopto… digo… así no te sentís solito… Por suerte estábamos cerca y mamá le pidió que parara así bajábamos. -¿Queda cerca la casa de mi cuñado de acá? Dijo el chófer -Un par de cuadras… -Indícame preciosa y te llevo, esta zona es media jodida y más a esta hora, bajarte acá sería como entrar a la boca del lobo. A mami le pareció bien y él nos dejó en la puerta de la casa de mi tío, antes de descender de la van él le entregó una tarjeta diciéndole. -Ni se te ocurra cuando te vayas tomarte un colectivo, yo tengo que trabajar toda la noche, llámame no importa la hora que sea, que los paso a buscar y los llevo… y por ser vos no le cobro la vuelta Jajaja, que te diviertas mi reina… Le guiñó un ojo y se fue. Bajar de la camioneta fue como bajar del tren fantasma. Ya en la entrada tocamos el timbre y en un instante nos abrió el portón mi tío, nos agradeció con efusividad por haber ido y nos hizo pasar, atravesando el enorme parque llegamos a la casa que estaba repleta de gente, mi tía ni bien me vio me colmó de besos y mis primos se acercaron a saludarme. El sobrenombre de mi tío es Pipo y es un hombre de estatura promedio, dueño de una prominente panza, mi tía se llama Romina, tiene 40 años, es rubia, tiene ojos claros y unas tetas descomunales, años atrás fue una belleza pero sus hijos y la falta de cuidado físico le hicieron perder el resplandor que supo tener antaño, ellos tienen 3 hijos el mayor tiene 16 años y se llama Alejandro y con él nunca me llevé bien porque siempre fue un abusador conmigo; Sus otros hijos son Ulises de mi edad y Luisa que es un año menor que yo. Luego de cenar subimos con Uli a su cuarto a jugar a la Play, al rato llegó Luisa y un par más de amigos de ellos, habrán pasado como dos horas cuando bajé a tomar algo, en la habitación habían a esa altura tantos chicos que creo que ninguno notó mi ausencia. En la sala habían puesto música y varias parejas estaban bailando, el resto estaban conversando y bebiendo como si no existiera un mañana, busqué a mi madre con mi mirada y pronto la encontré, estaba con mi tía ambas con un vaso de trago largo tomando alguna bebida alcohólica seguramente y lo que me resultó extraño es que estaban rodeadas por un grupo de 6 hombres de mediana edad, pero ninguno era mi tío, todos con cara de que la estaban pasando bien, entre charlas y risas uno de ellos sujetaba a mamá de la cintura y de vez en cuando la mano bajaba y se posaba en una nalga, con el correr de los minutos la distancia que existía entre los cuerpos de él y el de ella fue perdiendo su espesor, otro de los tipos le hablaba al oído a mi tía y le daba casi de forma imperceptible fugaces besos en su cuello, rozando con sus labios la fina piel como si se tratara de una briza de verano. Mi tío estaba en la otra punta de la casa bebiendo vino y fumando puros con un grupo de gente que hablaba de temas bursátiles, que las acciones de Tesla volaban, que las de Netflix pronto iban a bajar dado la deuda de la empresa y que bajaron los ingresos, y otras cosas que ni recuerdo, quise apartarlo con disimulo para que viera que estaban cortejando a su mujer y su hermana, pero hablar de Warren Buffett fue más importante para él. Tras mi derrota me acerqué hasta donde estaba mi madre e intenté integrarme en al grupo, mi tía al notar mi presencia rápidamente plantó a quien la estaba cortejando, al advertir que mami había bebido más de la cuenta se lo hice saber, me miró brevemente y siguió como si nada, como el tipo que la tenía sujeta continuó sus avances ante las miradas pícaras de los otros participantes, cambié mi posición y me situé entre ellos, repasándolos. Jocosamente el hombre dijo al grupo: -Sandra parece que a tu chaperón no le gusta mi presencia Jajaja. -Y eso que hoy le dijeron que no fuera un guardabosque Jejeje. -Veo que tengo un rival… -¿Por qué no vamos a bailar? Él aceptó la propuesta de ella, volvió a sujetarla algo más abajo de su cintura y fueron a la improvisada pista de baile, sus cuerpos se movieron al son de Unchain My Heart sin soltar ninguno de los dos los vasos de alcohol de sus manos, pronto la canción terminó y empezó You Can Leave Your Hat On, de pronto los movimientos de ella cambiaron, se hicieron más sensuales como imitando a Kim Basinger en el mítico film 9 Semanas y Media, sus caderas se menearon como si fueran una coctelera, se subió la pollera de su vestido hasta convertirla en minifalda y amagó varias veces con subirla más, bajó sus breteles descubriendo sus hombros de manera muy sexy. Los espectadores reían y aplaudían alentándola a que siguiera con el show, entre ellos, próximo a mí, estaba el odioso de mi primo Alejandro que se la comía con los ojos y comentaba con un amigo de mi tío lo buena que estaba mi madre. -Me parece que tu tía anda necesitada de pija. -Si pudiera sabes la cogida que le pego, le rompo ese culo a pijazos. -Que tentación tenerla tan cerca y no poder tocarla. -En el verano cuando viene con su hijo a disfrutar de la piscina, se pone unos bikinis que te dejan bizco, te juro que las nalgas se comen la tanga, es una locura… y si el agua está fría los pezones se le ponen duro como piedras… las pajas que me hago en su honor… -Algo me comentó tu viejo… -Me imagino… si hasta él a veces tiene que disimular ante mi vieja que está al palo Jajaja. -Tu tía tiene cara de petera, con esa boca debe hacer unas mamadas que te saca hasta el alma… Esos comentarios me hirieron de ira y dolor, tenía que detener ese show de alguna manera, aprovechando que las miradas no estaban puestas en mí, me arrimé hasta tablet que tenía programada la música, borré todos los temas que le seguían al que estaba sónando y me alejé de ahí, obviamente al rato la pista de baile quedó en silencio, mamá aprovechó para ir a beber algo fresco y reponerse de su agitación, su musculoso acompañante la seguía a sol y sombra como perro de caza. -¿Gas que hacés acá abajo? Estamos armando los equipos para jugar un campeonato de PES2020, dale vamos… Era mi primo Uli que me vino a buscar, no me quedó otra que acompañarlo, pese a que mis pensamientos estaban abajo con mi madre y su borrachera, debo confesar que con la partida me olvidé de ella, solo cuando terminamos uno de los partidos y estábamos a la espera de que nos vuelva a tocar el turno, recordé que mami estaba sola y al acecho del amigo de mi tío, me fui acercando a la puerta de a poco a los pocos minutos estaba nuevamente abajo, busqué por toda la sala y de mi madre ni noticias, fui a la cocina sin suerte pero ahí la puerta del pequeño cuarto que mis tíos usaban como cava y para guardar algunos quesos y otras cosas estaba entreabierta, con cautela me fui acercando para no ser visto y vaya sorpresa perturbadora que me llevé… el hombre que hacía como 45 minutos estuvo hablando con mi primo estaba parado dándome la espalda, sus piernas estaban separadas y una mujer se hallaba arrodillada a sus pies chupándole la verga con arrebato, los dedos de él estaban enredados en la cabellera de ella marcando el ritmo de la mamada, no había dialogo, solo gemidos. Me puse detrás de la puerta para escuchar y ver mejor, entre las cosas inentendible que escapaban de la boca de ese tipo, algo casi me mata de odio. -Cuanto morbo me da que tengas mi pija en tu boca y que tu hijo tal vez ahora esté buscándote… sin saber que sos mi putita… Ufff… Para que ella cayera en tan poco tiempo en las garras de ese sujeto la relación tendría que ser de antes, ¿Acaso serían pareja desde algún tiempo atrás y me lo estarían ocultando? , ¿Por qué? , ¿Los presentó mi tío? No les miento si les digo que me dio asco lo que estaba presenciando y hasta ganas de vomitar tuve. -Ya está bien, ahora párate, date vuelta que quiero ponértela. Se acomodaron y el alma me volvió al cuerpo, ella no era mi madre, sino mi tía, y cuando él se refería al “hijo” era pensando en mi primo Alejandro, quien se merecía esta putada, al fin la suerte estaba de mi lado, saqué mi celular y apenas asomándolo por la puerta comencé a filmarlos, la baraja de la vida puso en mi mano una escalera real y pensaba sacarle jugo y disfrutarla, la próxima vez que Alejandro me acosara, le enseñaría el vídeo. Ese tipo estuvo por más de 10 minutos taladrando a mi tía como un salvaje, parecía que se estaba cobrando con ella alguna rencilla que habrá tenido con mi tío. Cuando los fuertes resoplidos de ese sujeto anunciaban que estaba pronto a eyacular, paré la filmación y escapé de ahí antes de ser atrapado. A pesar de mi alegría, no sabía dónde estaba mamá, salí por la puerta trasera al parque y con tenacidad la busqué entre los árboles y las abundantes plantas. Les aclaro que la casa de mi tío es enorme, tiene como 2 hectáreas y la mayor parte del terreno es el parque. Al costado de la piscina me encontré a los hombres que antes estuvieron con ella, estaban fumándose un porro, advertí que justo faltaba entre ellos el tipo que tenía a mi madre sujetada por la cintura, me les acerqué y les pregunté si la habían visto, todos negaron con sus cabezas pero sonreían de forma cómplice, uno de ellos me dijo: -¿Te fijaste en el baño? Las mujeres cuando van suelen tardar bastante… por ahí se encontró con algún familiar o conocido en la espera por entrar y se pusieron a charlar. -Seguramente… -respondí -¿Querés una pitada? -¿Eh? … no gracias. Otro de los sujetos dijo sarcásticamente: -No te preocupes y déjala tranquila que le debe estar dando de comer a la coneja Jajaja. -¿Qué coneja? -Una que anda por el parque y por lo que vi es algo peludita… -No sabía que había conejos acá. -Cada tanto aparece alguno Jajaja… esta para mí vino hambrienta… -¿Y cómo sabés que es hembra? -Ya cuando tengas nuestra edad vas a tener experiencia para darte cuenta… caso contrario, frecuentemente te vas a llevar una sorpresa Juaaaa Jajajajaja… pero esta de la que hablamos la vas a reconocer enseguida si la ves, porque es chiquita y es negra… -¿Una coneja negra? -Negra y peludita… Jajajajajaja. Y otro de los hombres acotó: -Negra, peludita y sobre todo insaciable… la viciosa se está comiendo un buen trozo… de zanahoria bien gorda y larga Jajaja. Me alejé de ellos y seguí buscando, en la zona más obscura, detrás de un robusto olivo me pareció ver movimiento, extrañado me dirigí ahí, guardando distancia pude reconocer a mamá de espaldas al árbol siendo abrazada y besada apasionadamente por el tipo con quien bailó, me acomodé detrás de una planta para ver mejor y saque mi celular y empecé a filmar sabia que me podría servir después, quedé pasmado al notar que el vestido estaba tirado sobre el pasto y ella estaba desnuda, solo llevaba puesto las botas y el collar, en cambio él estaba vestido… de la cintura para arriba, porque para abajo estaba literalmente en pelotas, al verlo así entendí los que sus amigos quisieron decir con eso de una zanahoria bien gorda y larga, pero más se asemejaba por el gran tamaño a un pepino. El tipo apretaba las tetas, le manoseaba el culo y ella dejaba que le metieran mano, al tiempo que su boca era explorada por la lengua de ese hombre y su concha rozada continuamente por la pija. -Dale… ¿Qué te cuesta? , Seguí chupándome la verga un cachito más… ¿No ves que está parada por vos? -Nooo… ya te dije que no, es tarde, estuvimos acá un largo rato, Gastoncito me debe estar buscando… -Él debe estar jugando con sus primos, mi pija te necesita más que tu hijo… mira hasta de la puntita le sale agüita, eso es un lágrima, está llorando porque no le querés hacer más mimitos… quiere volver a sentir tu lengua en su cabecita… -Cabezota querrás decir… -Llámala como quieras mientras me la chupes… seguro que hace mucho tiempo que no tenés una así, de este tamaño. Mamá no respondía, su mirada estaba clavada en esa verga palpitante, inconscientemente entreabrió sus labios y pasó la punta de su lengua sobre ellos, dejando una estela húmeda brillosa a su paso. Él sujetándola de los hombros hizo fuerza hacia abajo, obligándola a arrodillarse, luego apoyó el glande en la boca y con un lento movimiento de cintura hacia delante, le fue introduciendo la pija de a poco. Le llevó unos minutos a mamá salir de su pasividad y tomar las riendas de esa mamada. Sujetó la verga por la base con una de sus manos y le pasó su lengua por todo el largo, con especial atención en la gorda cabeza, la cual besó con la misma suavidad y cariño como si se tratase de un bebé, Alternaba la chupada con las lamidas, mientras que con la mano lo masturbaba sin parar. Cuando recorría el venoso falo con la lengua miraba a los ojos de ese tipo, a pesar de ser una escena similar a la de una peli porno, ella lo hacía con una dulzura como de quien prueba un helado por primera vez en su vida. -Que dura está… Mmmm… ¿Es por mí? , ¿Yo te la pongo así? -Claro que Siii… pero no hablés… cómela… El alcohol había convertido a mi madre en otra persona, absolutamente desconocida para mí. El tipo la agarró de la coleta del cabello y con fuertes movimientos de pelvis la cogió por la boca, primero hundiendo su verga hasta la mitad y luego obligándola a que se la trague completamente, para poder recibir bien las estocadas si ahogarse, ella llevó la cabeza hacia atrás, levantando las tetas, las cuales se veían gloriosas. De vez en cuando tosía y tenía que liberar de su boca esa tranca que no la dejaba respirar, pero a los pocos segundos él se la volvía a meter. Tras un rato interminable, el usando sus dedos índice y pulgar de cada mano, como si fueran unas pinzas apretaron los erectos pezones y la hizo pararse, otra vez sus lenguas se juntaron en un beso. -No doy más nena, te voy a coger… -Siii… hacelo, estoy ansiosa. Mamá se acomodó en cuatro patas sobre su vestido, elevando su pomposo culo, pronto la cara de él se incrustó entre los cachetes de su culo, el tipo metió su lengua en cuanto recoveco encontró, estimuló el clítoris hasta enloquecerla y hacerla gemir de placer, con su saliva fue humedeciendo la concha y lubricándola, preparándola para la cogida. Una sonora nalgueada nos hizo saber lo que se venía, ella bajó más su cabeza y flexionando su espalda elevó su culo, los labios vaginales se veían sabrosamente gordos y jugosos, rodeados de una prolija mata de pendejos obscuros, cuando sintió que la caliente punta de la pija la penetraba, separó un poco sus pies, para no lastimar a ese desconocido con los tacos agujas de las botas. Tuvo él que empujar bastante para que el gordo glande entrara por completo, cuando al fin lo hizo mami soltó otro gemido, más fuerte que los anteriores. Agarrándola de las caderas, con cada embestida fue aumentando la velocidad, -¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ayyyy Diooos Siiiii Asiiii Cogemeeee Asiiii Diooos Queee Pijudooooo Queee Sooos! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhhh! Gimió mamá y los ojos de ella se pusieron en un momento en blanco. Cuando la gruta de placer por la cual yo nací, se acostumbró a las dimensiones de esa verga, ella se relajó y giró la cabeza para mirarlo a la cara mientras la cogía y gritarle con una voz de putita que jamás escuché: -¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Sí, sí, si papi, metémela hasta el fondo… Uyyyyy Queee Ricoooooo Ohhhh… Asiiiiiiii! dame más, más… ¡Ahhhhhh! … ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! Enardecido, él la penetró con violencia, sus pesados testículos golpean como campanas llamando a misa el pubis de ella, incansablemente. El pulgar de la mano derecha del tipo comenzó a hurgarle el ano y ella de manera instantánea levantó y giró su torso, se miraban con una mezcla de rabia y deseo, él le estrujó una teta y ella le ofreció su boca abierta para que la besara. Quien los viera juraría que nacieron para prodigarse placer el uno al otro. Un ruido originado a mi espalda me hizo dar cuenta que no estábamos solos, que a unos metros de donde yo estaba, entre las plantas se escondían los amigos de ese tipo y mi primo Alejandro. Seguí mirando a la pareja, mi atención no estaba concentrada en ellos, ya lo haría más tarde. Mami era una máquina de producir gemidos, estaba extasiada. Las embestidas dejaron de ser rápidas, pasando a ser punzantes, se enterraba en ella como una daga, hasta el fondo. -¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ohhh… cuanto hace que no me cogían, ya necesitaba sentirme mujer… Uhhhh Mmmm! … ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhh! -Petiza me vuelve loco tu concha estrechita, es una Deliciaahhh. -Úsala como y cando quieras… pero úsala. Ver las redondas y firmes nalgas, bien en pompa, recibiendo una verga soberbia como la de ese tipo, me excitó hasta el fondo de mí ser, y que la protagonista fuese mi madre le daba un gustito extra. En un momento él se detuvo para descansar y tomar un poco de aire, con estupor observé a ella moviendo su hermoso cuerpo hacía atrás… ¡¡¡Mamá se lo estaba montando! ! ! Ella misma se penetraba. Él se la sacó por completo y le dio un besito en la concha: -Además de calentita, sabe rica… La escupió y volvió a bombearla, ella se mordía los labios gozando de los pijazos. Transcurrió un buen rato y de pronto el cuerpo de ella comenzó a temblar, una catarata de orgasmos se apoderó de mamá, quiso levantarse pero él se lo impidió apretándole la cabeza contra el pasto, la boca de ella se baría y cerraba como un pez fuera del agua. La verga entraba fuerte, avanzando sin detenerse hasta golpear la puerta del útero, ella en cierto momento pudo liberarse de la mano que a tenía aprisionada, giró su cuerpo hacia él y lo besó con pasión. Aunque parezca extraño esa forma de besar me calentaba más que las escenas de sexo y al mismo tiempo me provocaba unos celos incontrolables. El diminuto y voluptuoso cuerpo de mami parecía que se iba romper producto de la agujereada que estaba recibiendo, pero soportaba estoica los impactos de pija. Que estuviera con las botas puestas la hacía ver tremendamente puta. Las tetas se movían de una forma hipnótica, y ese beso de lengua que continuaba… ¿Por qué mierda lo tenía que besar, no era suficiente con abrir las piernas y dejar que un extraño se la ponga? Ella seguía estremeciéndose y su cara delataba el paroxismo sexual que está sintiendo. -Leandro ahora acóstate vos… Por fin dejó de ser desconocido ese tipo, ahora supe su nombre. Cambiaron de posición, él se acostó de espalda sobre el arrugado vestido y ella le chupó la pija unos minutos sin importarle que estuviera impregnada de sus flujos y de líquido preseminal, frunciendo los labios, haciendo trompita le daba sonoros besos en la abertura de la uretra. Maliciosamente ella le dijo: -¿Querés metérmela de nuevo? Mamá se ensalivó una mano para lubricarse la vagina y dándole la espalda se clavó la durísima verga, las estas eran apretujadas por las manos de Leandro, ella lo montó como una amazonas, subiendo y bajando su cuerpo y de vez en cuando haciendo movimientos circulares con su cadera, las tetas rebotaban y los tacos de sus botas se clavaron en la tierra, cada vez que sus pezones eran pellizcados ella respondía con gemidos fuertes, sin importarle quien la pudiera escuchar, estaba bien claro que hasta exprimir esa pija, mami no iba a descansar. -Lea por favor avísame cuando estés por venirte, mira que no tomé la píldora y lo estamos haciendo a pelo… no quiero un dolor de cabeza… -La concha te va a doler cuando terminemos de garchar. Mi madre siguió moviéndome sin ninguna preocupación hasta que súbitamente él la sujetó de la cintura y gritó como un búfalo atravesado por una lanza, ella frenó en seco su jineteada diciendo: -Nooooooooo… hijo de puta te dije que me avisaras… me acabaste adentro… -Discúlpame, intenté avisarte pero no pude contenerme… -Puedo quedar embarazada. -Disfrutemos del polvo Sandra, no lo arruines con reproches, más tarde buscamos una farmacia de turno y te compro la pastilla del día después… Permanecieron un rato largo acostados prodigándose besos y caricias, cuando se levantaron para vestirse ella le recriminó: -Mirá me dejaste la concha chorreando leche… -¿Y qué esperabas Sandra de mí? Cuando te en la sala que era un toro reproductor a vos te hizo gracia y no me creíste… ¿Viste que no te mentía? -Si me olvido de tomar la pastilla, fija que quedo de encargue. -Espera que te limpió. Leandro estaba limpiando la vagina con su bóxer cuando un quejido lo alarmó, agudizó su vista y sorprendió a mi primo Alejandro masturbándose, voltee mi cabeza y solo lo vi a él, el resto de los espectadores no estaban, o no los encontré. -¿Qué pasó Lea? ¿Viene alguien? -No… Él salió corriendo y tomó por sorpresa a Alejandro, quien con sus pantalones a la altura de los tobillos intentó huir y se cayó al primer paso, con una mano lo sujetó de un brazo y lo llevó hasta donde estaba mi madre. -Sandra tenés un admirador… Jajaja. -¡¡¡Alejandro! ! ! ¿Qué haces vos acá? -Nos estaba espiando. -Ay, qué horror… si se lo cuenta a mi hermano en el quilombo que me va a meter… para colmó está buena parte de la familia en la fiesta… -Lo agarré con las manos en la masa… ¿O debo decir Ale que te sorprendí con tus manos en la pija? Jajajaja… flor de paja se estaba haciendo… ¿Te gusta cómo garcha tu tía? -Alejandrito por favor, no le cuentes a nadie… -Yo que vos, hago algo para que el pendejo no hable, porque si le dice a alguien se va a enterar tu hijo y eso va a ser peor que si se entera tu hermano o alguien más… ¿Cómo se lo vas a explicar a Gastón con lo celoso que es? Mamá miró a Leandro pensativa, reflexionando en las palabras que acababa de decir, entendió que debía comprar el silencio de su sobrino de alguna forma, para que no se rompa el núcleo familiar y lo más importante, que jamás se enterara su amado hijo, esto último sería peor que la muerte para ella, no podría perdonarse hacerme sufrir. Sólo quedaba una cosa por hacer y ella estaba decidida a pagar el precio. -Alejandro por favor acércate… no tengas miedo… Mi primo con muchas dudas caminó hasta mamá. Leandro la observaba con una mirada desafiante, en silencio. -Amorcito, va a ser mejor que te quites esto… pareces un pingüino borracho caminando así. Dijo ella, ayudándolo a quitarse los pantalones. A pesar del nerviosismo de mi primo, el guacho tenía la pija al palo, levemente curvada hacia arriba, este hecho no le pasó desapercibido a mamá. -Que sobrino pijudo hermoso que tengo… que lo que viste y esto sea nuestro secretito… ¿Te parece? Si esperar una respuesta, ella se agachó y se metió la pija en su boca para succionarlo como una campeona, muy a su pesar, los gemidos de su sobrino la excitaron. -Pero mira vos que verga grande tenés… seguro que esta no la heredaste de tu padre… ¿Leandro vos no serás el padre, no? A decir verdad, no sé si eso lo decía para calentarlo más a mi primo y que termine rápido, si era en serio, o si lo hacía con la intención se sembrar discordia entre él y sus padres. -Sobrino yo que vos le pregunto a tu mamita si la cigüeña antes de visitarla, no pasó antes por la casa de Leandro… la tienen muy parecida… con Romina nos contamos todo, pero esto nunca me lo dijo… parece que estoy de suerte después de todo, tengo 2 pijudos en una noche… Para estar más cómodos a mi primo lo hizo acostarse y ella en cuatro continuó mamandolo. Leandro nuevamente al palo, aprovechó que tenía los agujeros a su disposición, se acercó a ella escupiéndose la pija y aferrándola de la cadera a un ritmo calcino comenzó a culearla, mamá quiso resistirse pero cuando abrió la boca para protestar, Alejandro le volvió a meter la verga en la boca más profundamente. -Esto es por hablar mal de mi madre… -se burló mi primo Leandro la penetraba lentamente, se la enterraba hasta el fondo, la sacaba casi por completo y la volvía a clavar, disfrutando del momento le dijo: -Vas a regresar a la casa con la concha y el culo roto, y la boca oliendo a semen… será mejor que te laves antes de saludar a alguien Jajajaja… -Ojala que mi primo Gastón corra a darte un beso… -Aprendes rápido pendejo, demostrale a esta putita quien manda. La verga de Leandro estaba súper hinchada, era enorme y destrozaba el ojete sin piedad, mamá parecía inerte, apenas se movía, estaba dominada, el enculador se dio cuenta y aumentó el ritmo, parecían un par de perros callejeros cogiendo, algunas veces él marcaba su presencia pegándole un pijazo fuerte haciendo que mi madre saliera de su letargo, dando un respingo y moviera sus brazos aleteando y gritando. -¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Uyyyy Diooos Meee Estaaas Matandooooo Meee Estaaaas Partiendoooo Todaaaaa! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! ¡Aaaayyyyyyy! Alejandro fue perdiendo la vergüenza y se entretenía manoseando las tetas, apretándolas y estirando los pezones endurecidos. Le tomó mucho tiempo aflojarse y acostumbrarse a la culeada caníbal, pero cuando lo hizo su actitud cambió drásticamente, estaba lujuriosa, se deleitaba con la pija de su púber sobrino, cuando intuía que estaba por acabar, la soltaba para que se recuperara y luego volvía al ataque feroz, paladeándola, rozando con sus dientes el glande y pasándolo por sus gordos labios como si se tratase de un rouge. -¿Te gusta cómo te la chupa tu tía? -Siiiiii. -¿A cuál de todas tus tías querés más? -A vos… Ahhhhh… -El amigo de tu papá tiene una pija monstruosa y me está rompiendo el culo, bebé… Ayyy… ¿Te gusta ver cómo lo hace? -Me encanta. -Antes me destrozó la concha, pero me parece que no solo a mí me lo hizo… creo que desde hace años también se lo hace a tu mamita… pórtate bien y hacete amigo de él, tal vez te deje espiar… -Uffffff. -Dos vergas casi iguales es muy difícil de encontrar y menos en un mismo lugar… quién te dice que por ahí, este señor, el hijo de puta que se garcha a las mujeres de la familia, es tu papá… ¿No le querés preguntar si se coge a tu mami? -… -¿Te comieron la boca los ratones? Por lo dura que se te puso, te calienta la idea… dale, pregúntale que yo también quiero saber… -Leandro… ¿Vos te Cogggg… ¡Uhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! … Justo cuando Alejandro iba a preguntar, un par de chorros de semen salieron de su pija ensuciando la cara de mamá, y casi enseguida Leandro le enlechó el culo. -Ale si querés que se repita, espero que sepas guardar el secreto. -Si tía, quédate tranquila, que de mí nadie se va a enterar. -¡Gracias bebote y ya que estamos vamos a darte un premio por tu silencio! Dijo ella y puso una mano en el pecho de mi primo y lo acostó en el suelo luego ella se fue subiendo encima de Alejandro gateando mirándolo con cara de puta luego fue moviendo sus piernas perfectas hasta colocarlas sobre la cintura de mi primo y agarro su pija enorme con una mano y la guio hacia su concha y la movió hasta clavarse la punta en la entrada ella se mordió el labio al sentirla luego coloco sus manos apoyadas sobre el pecho de Alejandro y moviendo su culo con suavidad se la clavo entera y empezó a cabalgarlo -¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ohhhhh Siiii Asiii Siiii Queee Ricooo Asiiii Cogemeeee Bebeeee Cogemeeee! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! Gemía ella montando su pija ella empezó a cogérselo con ímpetu cabalgaba con fuerza y se lo cogía a toda máquina -¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ohhhhh Uhhhh Siiii Papiiii Asiiii Cogemeeee Asiiii Diooos Queee Ricoooo Meeee Cogeeee Miiii Sobriiiii Siiii Cogemeeee Maaaas Siiii Cogemeeee Maaaas Ohhhh Siiii Asiiii Siiii Diooos Siiii Dameee Pijaaaaa Daleee Pijaaaa A Tuuu Tiaaaa Siiii Bebeee Damelaaaaa Todaaaa! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! Gritaba ella gimiendo como trola sus enormes melones bamboleaban al ritmo de su galopar. Estuvieron cogiendo casi 20 minutos ella estaba otra vez al borde del clímax -¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ohhhhh Siiii Aleeee Seguiiii Papiiii Nooo Pareeees Bebeeee Seguiiii Cogiendomeeeee Queeee Estoooy Pooor Acabaaaar Voooy Acabaaaar Sobreeee Tuuuu Enormeeee Pijaaaa! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! Gritaba llena de placer y ambos llegaron juntos al clímax -¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ohhhh Siiii Papiiii Asiiii Dameee Lechitaaaa Meee Haceees Acabaaar Cooon Tuuu Lecheee Hirviendooooo! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhhh! Gritaba ella cuando sus ojos se le salían de orbita y se le ponían en blanco mi primo le había acabado mucho más de lo le había echado en la cara. Luego del orgasmo mamá fue saliendo lentamente de arriba de mi primo y le comía la boca llena de lujuria. Luego los tres juntaron sus ropas y antes de vestirse mamá se higienizo con el agua de la piscina, haciéndole de campana los otros dos por si alguna persona aparecía. Cuando se estaban vistiendo yo aproveché para volver a la casa, una vez dentro regresé al cuarto de Uli y me justifiqué diciendo que estaba descompuesto en uno de los baños. Cuando llegó la hora de irnos, nos ofrecieron quedarnos a dormir en la casa, pero nosotros no aceptamos, bastante cansada estaba mamá y quería regresar a nuestro departamento. Leandro se ofreció a llevarnos, pero mi madre le respondió que no se molestara, que ella tenía la tarjeta de la van que nos trajo. -¡¿Eh?! ¿A ese tipo vas a llamar? , tiene una cara de delincuente que hasta asustaría a Al Capone… Dije sin pensar y tía Romina comentó: -Sandra es más seguro que te lleve Leandro… Mamá aceptó con la cabeza, nos despedimos de todos y cuando estábamos subiendo al Mini Cooper de él, me adelanté a mamá y me senté adelante. Tanto en el limitado baúl como en el asiento de atrás habían unas cosas de su trabajo y no se podían mover, mamá iba a viajar un tanto apretada. -¿Querido por qué mejor no vas vos atrás y tu mami adelante? -No, estoy descompuesto y me mareo atrás, me gusta viajar acá con la ventanilla abierta por si me dan ganas de vomitar… -Es cierto estuvo un buen rato en el baño y nuestro equipo perdió al mejor goleador -acotó Uli por suerte, favoreciéndome. Leandro abrió su perta y tiró su asiento para delante, otorgándole paso a mamá, justo en ese segundo apareció el odioso de Alejandro diciendo: -Yo también voy, ya le pedí permiso a papá y me dejó. -Hijo no molestes a Sandra… -Si a ella no le va a molestar, ¿Verdad? -Romina tiene razón tu hijo, no me molesta para nada… además puede aprovechar que el lunes es feriado y quedarse en casa hasta ese día por la noche… Gastoncito va a tener con quien jugar… -Bueno, entonces tu hermano el lunes a la noche lo pasa a buscar, chau, cuídense… -Tía mejor déjame pasar a mí primero y vos sentate en mis piernas que yo soy más pesad que vos… Dijo Alejandro con picardía Por mi rabillo del ojo pude ver como el desgraciado cuando mamá estaba por sentarse sobre él, en un movimiento muy sutil y planeado, extrajo su erecta pija del pantalón, mami al notarlo se sobresaltó. -¿Que pasó Má? Pregunté haciéndome el boludo -Nada hijo… una cosa suelta del asiento se me clavó… -¿Te ayudo a sacarla? -No corazón, deja a mamita que puede solita… el viaje es largo y me voy a entretener sacándola y poniéndola… -¿A dónde la vas a poner si no hay lugar atrás? -La voy a guardar en donde debe ir… además Ale me puede ayudar a acomodarla… vos tratá de dormir así no te mareas. Antes de abrocharse el cinturón de seguridad, Leandro dijo entre dientes, girando su cuerpo hacia atrás y dando solamente a mí la espalda. -Alejandro tírala afuera mira que no tomó nada y con la que le dejé dentro ya tiene bastante… A lo cual mami respondió: -Que loco, por ahí si quedo embarazada, tanto Gastoncito como vos Ale, van a tener un hermanito…  





Continuara...